Receta de polenta cremosa y consejos de recalentamiento
La polenta es un sencillo plato italiano de harina de maíz cocida, algo parecido a la sémola de maíz al estilo sureño. Puede prepararse en varias consistencias y es un sabroso acompañamiento de platos contundentes como el estofado de ternera. La polenta también es deliciosa por sí sola como cereal de desayuno. La polenta es fácil de preparar y se cocina rápidamente. Cuece la polenta un poco más si prefieres una consistencia más espesa. El queso rallado añade más sabor a este plato tradicional. Guarda las sobras en el frigorífico. La polenta es fácil de recalentar, y puedes hacerlo de varias maneras. La polenta enfriada puede cortarse en cuadrados -o en cualquier forma- y saltearse en mantequilla para obtener un excelente desayuno o guarnición. O puedes cortar la polenta fría en pequeños círculos y crujirlos en una sartén -se parecerán mucho a pequeñas arepas- y luego cubrirlos con algo sabroso, como ají de gallina o salsa de aguacate, por ejemplo, para hacer un pequeño y agradable aperitivo. Si extiendes la polenta en una capa fina en una fuente de pyrex mientras está caliente, será más fácil cortarla en círculos. Para recalentar la polenta hasta que adquiera una consistencia cremosa, caliéntala suavemente en el fuego o en el microondas, añadiendo un poco de agua o leche según sea necesario hasta que alcance la consistencia deseada.