Todos conocemos la cantinela: «¡Dos hamburguesas de carne de vacuno, salsa especial, lechuga, queso, pepinillos y cebolla, en un bollo con semillas de sésamo! Y esa «salsa especial» es realmente lo que hace que esta hamburguesa de McDonald’s sea un Big Mac, ¿verdad? Pues bien, ahora no tienes que ir a los arcos dorados para disfrutar de este fenómeno de la comida rápida; con esta receta, puedes hacer este codiciado condimento en casa. Esta «receta ultrasecreta» procede en realidad del Manual del Gerente de McDonald’s publicado en 1969. Estaba pensada para ser utilizada sólo en caso de emergencia si las tiendas se quedaban sin la salsa ya hecha. Por temor a que otras cadenas de hamburguesas se enteraran de la receta y utilizaran la salsa en sus restaurantes, esta página del manual se eliminó rápidamente. Pero ya era demasiado tarde: la receta se difundió de algún modo, se hizo pública al año siguiente y ha estado disponible desde entonces. Además de los ingredientes impresos que circulan en el dominio público, en 2016 McDonald’s decidió vender un número limitado de botellas (unas 4.000) de la «salsa secreta» en 40 McDonald’s australianos. Cada botella se vendió a 4,95 dólares y se agotó rápidamente en sólo 15 minutos. En realidad, era la segunda vez que la cadena de comida rápida ofrecía salsa embotellada en Australia: dos años antes, la empresa decidió subastar las botellas de «salsa secreta» para recaudar dinero para la organización benéfica Ronald McDonald, con pujas a partir de 18.000 $. Por suerte, ¡esta receta es gratis! Y se compone de ingredientes que podemos comprar fácilmente en la tienda. La receta original incluye referencias a productos de marca; si quieres recrear la fórmula exacta, ésta es la forma de hacerlo, pero, por supuesto, también son aceptables otras marcas. En algún momento, McDonald’s decidió deshacerse de los otros productos de marca y hacer la salsa desde cero, así que si miras en su sitio web verás que la lista de ingredientes de la «salsa especial» contiene cosas como alginato de propilenglicol, benzoato de sodio y EDTA disódico de calcio, por nombrar sólo algunos de los conservantes que ahora forman parte de la receta. 1:15 Mira ahora: Mini Macs, gran sabor: hamburguesas para fiestas Pull-Apart